Los dilemas éticos y los valores
Todos tenemos dilemas en nuestras profesiones o puestos de trabajo. No hay vida sin dilemas, como no hay trabajo sin ellos.
¿Quién no se enfrentó ante ellos en numerosas ocasiones?, y luego de atravesarlos quedaron con la amargura de no haber sido ni efectivos, ni auténticos o íntegros.
En este artículo vamos a plantear algunos de menor a mayor, entender porqué a veces es difícil enfrentarlos y cómo podemos estar preparados emocionalmente para tomar una posición ante los posibles caminos.
Si conocemos nuestros valores y objetivos, sabemos qué camino debemos elegir. Ahora bien, veamos algunos ejemplos de los posibles dilemas éticos que podemos enfrentar en nuestro ámbito laboral.
Supongamos que Ud. tuvo una idea que generó una solución creativa e innovadora para su empresa y su jefe la atribuye como propia. ¿Qué hace Ud.? ¿Lo enfrenta y le dice que se rectifique, o calla?
Si Ud. trabaja en una empresa como Enron o Parmalat y conoce los registros y políticas que la están llevando a una quiebra fraudulenta… ¿Denuncia a sus jefes o se queda sin decir nada?
Plasmado en estos ejemplos es fácil la respuesta para muchos, más si tenemos en cuenta que esos ejecutivos, a la hora de enfrentarse a esas decisiones, sopesan sus carreras, el sostén de sus familias, y la cultura de rutinas defensivas o esquizofrenia organizacional, no es fácil a la hora de saber qué hacer.
Si hay un clima de miedo y corrupción en la empresa, debo enfrentarme al dilema de que si no hablo me convierto en cómplice de la situación, pero si hablo pierdo.
¿Qué debo hacer ante este dilema?
En una cultura de miedo hay que prepararse para enfrentar las decisiones que emocionalmente nos toman y secuestran nuestra voluntad.
¿Qué debemos hacer ante estas rutinas defensivas?
Si tomo el camino de hablar corro el riesgo de perder mi trabajo.
Prepararme económicamente para amortiguar mi probable desvinculación.
Prepararme emocionalmente para renunciar a mi trabajo, ergo ser despedido antes que renunciar a mis valores
El miedo nos puede poner ante situaciones límites que nos da la posibilidad de conocernos… La verdad nos hará libres, como ha sido una frase bíblica, nuestra verdad, respetar nuestros valores, vivir de acuerdo a nuestra conciencia, respetando nuestra esencia nos hará libres. Aprender a cuidar el proceso de tomar las decisiones ante los dilemas éticos , nos da un paso a esa libertad.
Escrito por Víctor Raiban para Puerto Managers
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