Liderazgo en tiempo de alta volatilidad

Liderazgo en tiempo de alta volatilidad

La encuesta global realizada por la consultora PricewaterhouseCoopers para la cumbre de Davos, Suiza, revelo que según la opinión de 1344 CEO´s en todo el mundo  hay un claro retroceso en la confianza en la Argentina – del 26 % del año anterior a un 12 % para el año 2013 -. La encuesta refleja la falta de confianza en el país a raíz de las regulaciones impulsadas por el Gobierno, los costos operativos y salariales, la ausencia de reglas claras, y la “baja calidad” de las instituciones.

En el primer trimestre del año 2014 la sensación que ponderamos con nuestros clientes y del clima de negocios en el país se agravó tras la devaluación de enero y la aceleración de la inflación se degradó rápidamente. Es el peor índice desde fines de 2002, cuando se desató la peor crisis económica y social de los últimos años. Así lo indica un estudio de la Escuela de Posgrado de la Universidad de Belgrano. El clima de negocios cayó un 12,3 % a nivel anual.

¿Qué necesitan las organizaciones para enfrentar las condiciones externas en esta situación de crisis?

Los líderes  que no se preparan en el tiempo de alta volatilidad suelen utilizar mucho el ciclo de “ver-sentir-resistir”. Los líderes estratégicos se anticipan a la crisis.  Son sensibles a las emociones ajenas. Son capaces de aumentar las emociones positivas como disminuir las emociones negativas. De este modo, los líderes ayudan a sus organizaciones a dar un salto hacia el futuro, aún en tiempos complejos.

Los buenos líderes son capaces de pensar claramente. Se detienen e identifican no sólo donde está el problema en la organización;  el contexto que esta viviendo, sino por qué su gente esta actuando de esa forma en ese momento. Así pueden anticipar de antemano lo que se necesitará para generar un nuevo conjunto de emociones que sostengan un modo distinto de actuar.

Al entender que los sentimientos cambian el comportamiento, los líderes tienen la clave para ayudar a sus organizaciones a prepararse. Pero no basta contar con un equipo gerencial que entienda el momento que viven. También son necesarios los líderes preparados a todo nivel de la estructura organizacional. Si se reúne dentro de la organización a un conjunto de empleados que sean líderes en tiempo de alta volatilidad se obtendrá una compañía exitosa independientemente de las condiciones externas.

Las estrategias  que sugiero para liderar el cambio en clima de alta volatilidad son las siguientes:

1-Establecer un sentido de urgencia: las organizaciones que entienden los tiempos que viven crean un sentido de urgencia entre la gente más importante. Demuestran que hay una gran necesidad de transformación y motivan a la gente a asumirlo en vez de resistir al statu quo.

2-Fomentar el liderazgo participativo: cualquier cambio necesitará de liderazgo. Dicho liderazgo debe ser ejercido por una mezcla de gente con las habilidades necesarias, conexiones y autoridad. Mientras más fuerte sea este equipo, la crisis se atravesará con mayor facilidad.

3-Desarrollar una visión : La compañía no debe quedar paralizada por la inercia de la coyuntura. Es necesario trabajar la visión, poner foco en donde quieren estar una vez atravesada la crisis.

4-Comunicar la visión y misión no se trata sólo de explicar la visión y las estrategias sino de hacer entender la misión de la organización. En este sentido, es fundamental que el Ceo de la compañía lidere en forma personal y comunique la misión: el para que la compañía hace lo que hace, su credo.

La confianza en este tipo de organizaciones y en sus liderados puede verse incrementada significativamente con la observación de comportamientos con decisión y actitud, cuando los ejecutivos protagonizan y controlan las acciones estratégicas.

Escrito por Víctor Raiban